Teledetección

La teledetección a avanzado mucho gracias a los satélites, que se utilizan para observar la superficie de la Tierra desde los años 70 y desde entonces han hecho avanzar nuestra comprensión de la ciencia. El uso de satélites nos permite observar y detectar cambios en las regiones más remotas de la Tierra. El primer satélite de cobertura terrestre, llamado Landsat 1, fue lanzado por Estados Unidos el 23 de julio de 1972. Esta misión y muchas más han seguido proporcionando una enorme colección de imágenes por satélite. Según la Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior (UNOOSA), actualmente hay casi 600 satélites de observación de la Tierra en órbita alrededor de nuestro planeta, operados por varios países y cumpliendo diferentes tareas. Este artículo le ofrecerá una introducción a la teledetección, abarcando el espectro electromagnético, los sistemas de satélites activos y pasivos, los tipos de resolución que hay que tener en cuenta y los depósitos de satélites de libre acceso.

¿Qué es la teledetección?

La teledetección es el proceso de detección y seguimiento de las características físicas de una zona mediante la medición de su radiación reflejada y emitida a distancia (normalmente desde un satélite o un avión). Cámaras especiales recogen imágenes de teledetección que ayudan a los investigadores a "percibir" cosas de la Tierra. Algunos ejemplos son:

¿Qué usos puede tener la teledetección?

- Las cámaras de los satélites y los aviones toman imágenes de grandes áreas de la superficie de la Tierra, lo que nos permite ver mucho más de lo que podemos ver cuando estamos en el suelo.
- Los sistemas de sonar de los barcos pueden utilizarse para crear imágenes del fondo marino sin necesidad de viajar hasta el fondo del océano.
- Las cámaras de los satélites pueden utilizarse para obtener imágenes de los cambios de temperatura en los océanos.
Algunos usos específicos de las imágenes de la Tierra obtenidas por teledetección son:
- Los grandes incendios forestales pueden cartografiarse desde el espacio, lo que permite a los guardas forestales ver una zona mucho más amplia que desde el suelo.
- El seguimiento de las nubes para ayudar a predecir el tiempo o la observación de volcanes en erupción, y ayudar a vigilar las tormentas de polvo.
- Seguir el crecimiento de una ciudad y los cambios en las tierras de cultivo o los bosques a lo largo de varios años o décadas.
Descubrir y cartografiar la accidentada topografía del fondo oceánico (por ejemplo, las enormes cadenas montañosas, los profundos cañones y las "bandas magnéticas" del fondo oceánico).

Las cámaras de los satélites y los aviones toman imágenes de grandes áreas de la superficie de la Tierra, lo que nos permite ver mucho más de lo que podemos ver cuando estamos en el suelo.
Los sistemas de sonar de los barcos pueden utilizarse para crear imágenes del fondo marino sin necesidad de viajar hasta el fondo del océano.
Las cámaras de los satélites pueden utilizarse para obtener imágenes de los cambios de temperatura en los océanos.
Algunos usos específicos de las imágenes de la Tierra obtenidas por teledetección son:

Los grandes incendios forestales pueden cartografiarse desde el espacio, lo que permite a los guardas forestales ver una zona mucho más amplia que desde el suelo.

El seguimiento de las nubes para ayudar a predecir el tiempo o la observación de volcanes en erupción, y ayudar a vigilar las tormentas de polvo.
Seguir el crecimiento de una ciudad y los cambios en las tierras de cultivo o los bosques a lo largo de varios años o décadas.
Descubrir y cartografiar la accidentada topografía del fondo oceánico (por ejemplo, las enormes cadenas montañosas, los profundos cañones y las "bandas magnéticas" del fondo oceánico).